Bicicletas como arte y forma de protesta


El artista chino Ai Weiwei es responsable de algunas de las exposiciones que más revuelo han causado en los últimos años en las principales galerías de Europa y Estados Unidos. Ha colaborado, además, con Amnistía Internacional, con obras de arte conceptual, diseño arquitectónico y, en general, instalaciones de arte con una gran carga de crítica social. Es un artista multifacético y con una mente abierta.

Ha trabajado con varios soportes, como la fotografía, la escultura, la cerámica, el mármol, la madera vieja, el vídeo… y también bicicletas. Efectivamente, este artista es capaz de crear obras de arte con bicicletas.

El Gobierno de China censura la obra de este artista porque sus creaciones siempre tienen una lectura social relacionada con los cambios que se están produciendo en su país. Una de sus acciones protesta más sonada fue la de colgar un archivo de sonido en Internet donde se podían oír los nombres de unas cinco mil personas que murieron durante el seísmo de Sichuan, como protesta por la falta de previsión de las autoridades chinas. Su última idea, Forever Bicycles, es una metáfora del cambio social que se vive en China, para lo que ha usado bicicletas para elaborar la escultura.

Más de mil bicicletas forman un impresionante arco de unos diez metros de altura. Actualmente se puede admirar la obra en el Museo de Bellas Artes de Taipei. Completa la instalación una pantalla, al fondo, donde se puede ver una sucesión de imágenes abstractas que representan el rapidísimo ritmo con el que se está transformando la sociedad china.

¿Y qué tiene que ver la bicicleta con todo esto? Es, como decimos, una metáfora del cambio. Antes era el vehículo más utilizado del país pero ahora la gente puede permitirse adquirir motos y coches. ¿Es un cambio a mejor?

China imita el modelo occidental, un modelo que ya se sabe que es insostenible: comprar coches y emitir gases contaminantes unido a la gran dependencia energética para mantener el desarrollo económico. En las ciudades de los países ricos muchos ciudadanos apuestan por la bicicleta como modo de transporte, pero en China reniegan de ella. ¿Progreso?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *