Kit para convertir una bicicleta en eléctrica


Al precio que está llegando la gasolina y por poco concienciado que se esté ante el problema de la contaminación, desplazarse en bicicleta por las ciudades, más que una opción ecológica, se está convirtiendo en una exigencia medioambiental.

Claro que no todo el mundo quiere esforzarse en pedalear, por mucho que beneficie a la salud y la forma física. Por otra parte, los coches eléctricos aún no son competitivos en el precio y no todo el mundo, por desgracia, puede permitirse un coche que no contamine. Así, en este escenario, los próximos años podemos vivir una explosión en el uso de las bicicletas eléctricas. Algunos expertos creen que sus ventas podrían crecer más de un 7% cada año. Según la consultora Pike Research, en 2018 las ventas de este tipo de bicicletas pueden alcanzar los 51 millones de unidades, esto es, un aumento del 70% respecto a las vendidas durante 2011.

Pero, además, cabe la posibilidad de convertir cualquier bicicleta en una eléctrica. El único problema es que aumentará el peso del medio de transporte, el pequeño motor y la pesada batería, se usen o no, estarán ahí, y si pedaleamos sin usar la electricidad nos costará más mover la bici.

Sin embargo, hay una solución para este problema. Se llama Ridekick, un carrito que convierte una bicicleta normal en eléctrica y que puede ser instalado y desinstalado en tan solo unos segundos.

Un pequeño carrito con ruedas permite llevar este kit eléctrico de una forma más cómoda. Dentro del cajetín, hay un motor y las baterías. Además, sobra espacio para transportar otros objetos.

Con este kit, se puede convertir cualquier bicicleta convencional en eléctrica. La primera vez que se instala, la operación puede durar unos doce minutos. Pero, una vez instalado todo el cableado, se puede quitar y poner el sistema eléctrico en unos pocos segundos.

La configuración propuesta por sus diseñadores es la de un motor de 500 W, alimentado por una batería de plomo de 24 voltios y 12 amperios. Estas características permiten que la bicicleta pueda alcanzar una velocidad máxima de unos 30 km/h y una autonomía de casi 20 kilómetros.

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