Un bólido propulsado con hidrógeno


Se celebró en Madrid una carrera en un circuito urbano alrededor del estanque del Parque la Casa de Campo. En ella, el coche IDEA CEU Car se impuso en la modalidad de prototipos de hidrógeno. Su marca: 102,78 kilómetros por kilowatio/hora.

El IDEA CEU Car es un vehículo eléctrico con motor de hidrógeno creado por estudiantes e investigadores de Ingeniería del Diseño de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia. Competía con otros veinte vehículos de España, Italia y Portugal en la prueba urbana de movilidad sostenible Madrid Ecocity.

La competición se celebró en un circuito urbano donde el IDEA CEU Car se impuso en la modalidad de prototipos de hidrógeno con una marca de 102,78 kilómetros por kilowatio/hora, es decir, que, con la energía equivalente a un litro de gasolina, el IDEA CEU Car puede recorrer 890 kilómetros.

Con este resultado, el IDEA CEU Car confirma su condición de vehículo más eficiente de España, que ya logró en octubre de 2011 al ganar la competición Solar Race Región de Murcia, celebrada en Cartagena, donde logró recorrer el equivalente a 4.402 kilómetros con la energía de un litro de gasolina empleando baterías para su funcionamiento.

Por cada 500 kilómetros recorridos, el IDEA CEU Car sólo consume el coste de un kilowatio/hora, esto es, 14 céntimos de euro.

La competición en Madrid ha servido, además, como puesta a punto del modelo IDEA CEU Car para la competición internacional Shell Ecomarathon, que se celebrará en mayo en el circuito holandés de Rotterdam. En la última edición, el IDEA CEU Car quedó quinto de Europa en la categoría de hidrógeno y séptimo en la clasificación final, entre los 222 equipos participantes de toda Europa en una competición internacional de movilidad sostenible considerada como la más importante y con más tradición del continente.

El IDEA CEU Car sólo necesita la potencia de una bombilla (entre 22 y 50 vatios) para su funcionamiento. Además es un vehículo totalmente ecológico, ya que en el motor eléctrico de hidrógeno presurizado, combinado con el aire, genera la electricidad necesaria para circular sin ningún tipo de emisión contaminante. El único residuo que se produce es agua.

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