El agua es un recurso escaso y totalmente necesario para vivir. En los últimos años, se han venido desarrollando campañas de concienciación para realizar un consumo responsable y que no se emplee más agua de la que realmente se necesita, poniendo además el foco en acciones en el día a día, que son fáciles de asumir por la población española. Y parece que estas campañas han dado resultado porque el consumo de agua en los españoles ha comenzado a bajar.
Los datos
Durante el año 2018, cada español ha consumido una media de 132 litros de agua al día, según los datos del XV Estudio Nacional de Suministro de Agua Potable y Saneamiento de España.
Una cifra que puede parecer elevada –y lo sigue siendo-, pero que refleja un importante avance hacia un consumo más responsable porque supone un ahorro de siete litros por persona al día y al año en relación al ejercicio anterior.
El estudio se ha llevado a cabo tomando una muestra formada por 34,2 millones de habitantes, lo que supone el 73,5% de la población y 1.585 municipios. Se han empleado datos consolidados de 2016.
Además, se han analizado los servicios públicos del agua urbana, poniéndose de manifiesto que el 73% es para uso doméstico, mientras que el 13% es de consumo industrial y comercial y el 14% se dedica a otros usos.
Aprovechamiento
El estudio también indica que una de las principales contribuciones del agua urbana es el aprovechamiento energético, que se cifra de 456 gigawatios por hora al año. Esto equivale al suministro anual de energías renovables y verdes a 150.000 habitantes.
La medida de gasto energético por cada 1.000 litros de agua es de 0,98 kilowatios por hora y metro cúbico en España. De esta manera, se estima que el consumo energético de servicio del ciclo integral del agua por hogar se sitúa en 117 kilowatios hora.
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