Cuidadores vestidos con disfraces de osos panda


El problema de criar animales en cautividad es que éstos se tienen que acostumbrar a vivir fuera de su hábitat natural. Los cuidadores tratan de que los animales se encuentren a gusto, pero no es fácil. Y, a veces, se recurre a métodos muy originales con tal de que las crías sobrevivan a las primeras semanas de vida, quizá las más difíciles de todas.

Para conseguir que unas crías de oso panda crezcan y sobrevivan a esas primeras y peligrosas semanas de vida, sus cuidadores han decidido vestirse con disfraces de osos panda. Así, simulando ser sus progenitores, se cree que la pequeña cría de oso panda estará más a gusto y sobrevivirá.

Todo por tratar de reinsertar en la naturaleza al oso panda sin que, digamos, sospeche que algo le falta: una madre y un padre. Los cuidadores del Parque Hetaoping se disfrazan de pandas cada vez que se acercan al pequeño Tao Tao, que ha sido criado en cautiverio y ha cumplido ya un año. Así vestidos, los cuidadores tratan de enseñarle los comportamientos necesarios para que se adapte a la vida salvaje.

El objetivo es dejar que vivan libremente en la naturaleza, pero, hasta entonces, los cuidadores tienen que acudir a poner algunas inyecciones y otras tareas propias del puesto. Sólo que han decidido molestar lo menos posible a los osos panda con la presencia humana. Así, para cualquier análisis de su estado de salud, se acercan con los disfraces puestos.

Se trata que los osos panda se acostumbren a una independencia total de los seres humanos, sin los que ahora difícilmente podrían sobrevivir en la naturaleza. Además, el parque donde habitan está lleno de cámaras para la vigilancia de estos animales que, en China, son casi sagrados y, de hecho, representan un símbolo para el país.

Si los pandas supieran lo que hace el ser humano para conservar su especie, quizá le entraría la risa. La verdad es que somos una especie muy contradictoria: somos los principales culpables de la desaparición de otras especies, pero también somos capaces de realizar acciones que rayan en el absurdo para que un animal sobreviva y viva feliz en su hábitat natural.

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