La contaminación del plástico es un problema latente. Este material tarda cientos de años en descomponerse en el medio ambiente. Por tanto, su consumo excesivo juega un papel importante en la crisis ambiental.
Cada segundo se vierten más de 200 kilos de plástico en los mares y océanos de todo el mundo, perjudicando seriamente la salud de los ecosistemas acuáticos y la supervivencia de las especies que habitan en ellas. Anualmente mueren más de 1 millón de aves marinas y 100.000 mamíferos marinos debido a los residuos plásticos (microplásticos), químicos y petrolíferos.
Sin embargo, el plástico es un un recurso que se utiliza comúnmente en nuestra vida cotidiana y es casi imposible evitarlo. Por esta razón, se están desarrollado diversas alternativas ecológicas, sostenibles y renovables para sustituir el uso de materiales contaminantes en la fabricación del plástico. Un claro ejemplo de ello es el plástico de cáñamo.
¿Qué es el plástico de cáñamo?
El cáñamo es uno de los cultivos que más biodiversidad crea a su alrededor. Podemos obtener tres materias primas: las semillas, la fibra y la pulpa. Durante mucho tiempo se ha utilizado para la elaboración de productos alimenticios, textiles, entre otros. Sin embargo, se destaca por sus múltiples beneficios para la salud.
En este caso, el plástico de cáñamo es un compuesto de fibra natural que puede sustituir a las materias primas a base de petróleo. No está hecho de aceite de cáñamo o semillas, sino del tallo. Su producción compite con los compuestos de ingeniería en propiedades como la rigidez y la alta tolerancia al calor.
Ventajas de utilizar plástico de cáñamo
Compostable y reciclable
Si el plástico de cáñamo es utilizado en la elaboración de botellas evitaría muchos efectos devastadores. En España, el 50 % de los envases acaba en vertederos. Por otro lado, en el fondo marino una botella de plástico tarda, de media, 500 años en degradarse, mientras que el plástico de cáñamo tarda de 3 a 6 meses en descomponerse y puede ser reciclado inmediatamente.
Resistente y ligero
En comparación con el plástico genérico, el cáñamo es cinco veces más rígido y 2,5 veces más fuerte. La duración de un producto influye en el tiempo de fabricación, así que resulta un ahorro de energía. También es un material resistente al calor, por tanto, puede ser utilizado para el uso culinario.
Apoya a los agricultores locales
La producción de plástico de cáñamo es más respetuosa con el medio ambiente y no deja estragos. Además, las plantas de cáñamo enriquecen el suelo en el que se cultivan. Sus raíces evitan la erosión del suelo para que las tierras puedan ser cultivadas nuevamente.