Los microplásticos llegan a la atmósfera

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El problema de los plásticos sigue creciendo. Diversos estudios los habían localizado en las aguas marinas y de ríos, pero ahora su presencia también se ha detectado en la atmósfera. Esto es debido a que el impacto de las gotas de lluvia genera otras más pequeñas, que se llenan de partículas. De este modo, al evaporarse, arrastran a los microplásticos a la atmósfera.

El estudio

El equipo de investigadores de la Universidad de Bayreuth ha descrito este proceso en un nuevo estudio en el que se recogen algunas primeras estimaciones. En concreto, se calcula que hasta 100.000 billones de partículas de microplásticos podrían llegar a la atmósfera cada año a nivel mundial por la cantidad de microplásticos contenidos en la lluvia.

Según la investigación, cada gota de lluvia golpea la superficie del agua. En ese momento y desde varios milímetros por debajo de la misma, se generan miles de gotículas. Estas se elevan desde una pequeña área anular alrededor de la zona en la que se ha producido el impacto. Los microplásticos contenidos en las gotículas tienen casi la misma concentración que la que existe en la estrecha capa de agua de la que se desprenden.

En el estudio también se ha prestado atención a sus trayectorias y tiempos de vuelo. Estos datos han permitido saber que el agua de las gotas de lluvia no contenía microplásticos cuando terminó en el océano. Sin embargo, la que contenía plástico lo liberó a la atmósfera.

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De este modo, las gotículas se mueven por el aire hasta que se evaporan, aunque este proceso puede liberar microplásticos que se incorporan a la atmósfera. Esto sucede habitualmente en la superficie del océano, ya que las condiciones de viento y temperatura favorecen los tiempos de vuelo relativamente largos de las gotículas y una rápida evaporación. No obstante, la mayoría de los microplásticos regresan al agua.

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