Son el primer mandamiento del comportamiento ecológico, pero entre ellas, las famosas tres erres, hay diferencias. O quizá no tantas. Como ocurre con los conceptos que están interrelacionados, también en este caso cuesta delimitarlos.
Sin embargo, es importante hacerlo si aspiramos a que nuestros gestos ambientales sean lo más verdes posible. En este post vamos a intentar dilucidar las diferencias entre la reutilización, el reciclaje y la reducción y, finalmente, intentar dilucidar cuál de las tres erres es la más ecológica. Aunque os adelanto que la respuesta deja la cuestión abierta.
Diferencias entre reducir, reutilizar y reciclar
Un ejemplo práctico servirá para ayudarnos a entender las diferencias de los tres conceptos. Compramos una mermelada que viene en un envase de cristal y cuando el producto se acaba lo guardamos para envasar nuestras propias conservas.
En este caso, estaríamos reutilizando el envase y lo mismo cabría decir si lo hiciéramos servir para guardar azúcar o sal, pongamos por caso. Sin embargo, darle un uso que suponga una transformación en mayor o menor medida podría decirse que es un reciclaje.
Es lo que ocurriría si, por ejemplo, usáramos el tarro de cristal para introducir una vela, a modo de decorativa lamparita o la convirtiéramos en una pieza de una original percha, sujetada mediante bridas, junto con otros envases para guardar pequeños objetos.
También esta vez sería un reciclaje, pues no estamos reutilizando el objeto para el mismo fin que tenía en principio, pero al tiempo estamos reutilizándolo como contenedor y, muy probablemente, reduciendo también el consumo de otros objetos que podrían sustituir a estos que hemos reutilizado o reciclado.
Se trata, por lo tanto, de un concepto un tanto difuso en determinadas circunstancias. Opinable, en realidad, pues la diferencia entre reutilizar y reciclar la separa una fina línea, aunque por lo general reciclar significa transformar. En el caso del reciclaje creativo esa transformación no siempre puede compararse con la que se lleva a cabo en plantas de reciclaje, por lo que el concepto también ha de adaptarse a uno u otro ámbito.
Por su parte, reducir implica no consumir o hacerlo minimizando el consumo, un concepto que en cierto modo también se relaciona con la reutilización y el reciclaje. De hecho, cuando reutilizamos o reciclamos estamos ahorrando recursos.
Aún así, al margen de estos matices, reducir significa, sobre todo, no consumir, abstenerse de hacerlo y, en este sentido, incluso el reciclaje puede llegar a suponer contaminar, sobre todo si en el proyecto en cuestión se utilizan otros materiales o, simplemente, si ese objeto reciclado se traduce en un impacto ambiental por su uso.
Es decir, podemos dar una y mil vueltas a las tres erres de la ecología, pero a la fin y a la postre no cabe duda de que reducir siempre es la opción ganadora cuando se trata de apostarlo todo al verde.
En otras palabras, reducir es sinónimo de una huella de carbono neutra y, en general, de una contaminación a otros niveles igual a cero, así como a un uso nulo de recursos.¿El resultado? Respeto ambiental máximo, siempre y cuando el remedio no sea peor que la enfermedad.
¿Reducir, la mejor opción?
Valorar las distintas opciones haciendo uso del menos común de los sentidos, eso que llamamos sentido común, es la mejor manera de tener un comportamiento eco-amigable compatible con nuestro bienestar. Hacer lo posible para pintar la vida de verde y ayudar al planeta debe ser un ejercicio cotidiano, y precisamente por ello es importante que nuestro estilo de vida vaya a la par con nuestro comportamiento ecológico.
Y, sea cual sea nuestro nivel de compromiso con el medio ambiente, siempre será mejor aplicar las tres erres antes que nada, aunque ese reducir, reciclar y reutilizar dan mucho juego a la hora de lograr el equilibrio entre nuestros objetivos y el respeto ambiental. En todo caso, reducir suele ser la ganadora para todo aquel que piensa en verde.
Si reducir creen que es la mejor opción. y si todos reducimos productos miles de personas se quedarán sin empleo.
Al final no morirán por la contaminación sino que de hambre por falta de empleo
para mi reducir seria bueno así, no se acumula tanta cosa en casa o la gente menos vota basura, cuando digo reducir no estoy diciendo que no compren. es comprar menos cosas que no son tan necesarias en el hogar,