Mantener un jardín en condiciones no es tarea fácil. Requiere un mantenimiento periódico y una serie de conocimientos que deben ir acompañados de los productos de jardinería que nos ayudan a cumplir con las tareas necesarias.
El cuidado de los setos es uno de los retos a los que se enfrenta cualquier persona que tiene la suerte de contar con ellos, sobre todo cuando llegan las estaciones de primavera y verano. Si quieres conocer las particularidades de cada seto y todo aquello que vas a necesitar para su mantenimiento, te recomendamos no perderte nada de lo que te contamos en este artículo.
Corte de los setos
Es importante conocer las técnicas de corte existentes para elegir la mejor en cada caso. Éstas dependen de varios factores, como por ejemplo la especie de seto, su edad y el estado en el que se encuentra. Además, hay que tener en cuenta que durante los primeros años de vida de un seto es de vital importancia realizar los cortes correspondientes, ya que de ello dependerá su frondosidad y el crecimiento. De hecho, un seto viejo puede rejuvenecer si somos capaces de poner en práctica el tipo de corte que precisan.
¿Cuándo es el mejor momento para cortar los setos? Se recomienda podarlos en días en los que el cielo está nublado o en días secos en los que no se ha producido ninguna helada.
Poda de mantenimiento
La poda de mantenimiento es capaz de transformar un seto por completo. Gracias a ella lograrás que se mantenga frondoso durante más tiempo, además de tener la posibilidad de darle la forma que quieras. Normalmente se suelen recortar los nuevos brotes unos 10-15 centímetros en línea recta, lo que te permitirá establecer la medida que quieras a largo plazo.
Los setos de hoja caduca requieren dos podas de mantenimiento al año, llegando hasta las tres en el caso del haya de crecimiento vigoroso. Distinto es lo que sucede con los setos de hoja perenne, que con un mantenimiento al año ya hacen.
Cuando los brotes están maduros es cuando hay que ponerse manos a la obra, si bien es cierto que para no molestar a los pájaros que anidan en las ramas deberíamos esperar hasta agosto, siendo otoño la mejor época para una segunda poda.
Poda de renovación
Los setos se hacen viejos y eso hace que requieran una serie de cuidados que implican una poda de renovación, ya que se quedan sin hojas en el interior y con una altura y una anchura que suelen ser excesivas, así que hay que recurrir a la poda para corregirlo.
Las podas deben ser fuertes para que rebroten con fuerza y se regeneren, aunque hay que ser consciente de que no todas las especies brotan con vigor, ya que hay algunas que no brotan en absoluto (los setos de coníferas) y otras lo hacen de forma discreta.
Se recomienda llevar a cabo la poda de renovación como mucho una vez al año, preferiblemente en invierno. Cuanto más profundo sea el corte, mayor grosor tendrán las ramas que crezcan.
Poda radical
La poda de rejuvenecimiento radical es la que demandan aquellos setos que tienen huecos considerables y han perdido su forma original por completo. En ese sentido, puedes recurrir a la denominada “poda hasta el tocón”, que tiene la particularidad de llegar a recortar la leñosa hasta el nivel del tronco de mayor grosor, normalmente con unos 50 centímetros de altura.
Con esta poda podemos reavivar su crecimiento incrementando los niveles de frondosidad. Eso sí, hay que tener en cuenta que no se puede hacer en cualquier momento del año. Lo mejor es ponerse en invierno, aunque evitando una temperatura de menos de 5 grados. Como hay que cortar ramas gruesas, la herramienta más indicada son unos cortasetos que no solo deben tener una distancia entre cuchillas considerable, sino que deben ir acompañados de un motor potente.
Consideraciones sobre los setos de hoja caduca
Los setos de hoja caduca son los que pierden sus hojas, algo que sucede todos los años en otoño. Reverdecen en primavera y requieren dos mantenimientos al año, aunque los más jóvenes necesitan incluso más podas. Sabrás si tienes que cortar más o menos el nuevo brote en función de si quieres que el seto siga creciendo.
Los setos de hoja caduca más comunes son el carpe, el espino albar, el arce campestre y el ligustro.
Consideraciones sobre los setos de hoja perenne
Los setos de hoja perenne no pierden sus hojas en otoño. Las mantienen durante los meses más fríos del año, lo que no significa que no sea necesario llevar a cabo una serie de cuidados de poda una vez al año. Los setos más viejos requieren una poda radical, mientras que la poda topiaria ligeramente cónica es la más adecuada para que el seto reciba luz en su parte inferior.
Algunos de los setos de hoja perenne más comunes son el laurel, el acebo, el boj común, la tuya, la lila, el rododendro y el tejo.
Cortasetos eléctricos y a gasolina
No tienes excusa para no recortar los setos, gracias a los productos de jardinería de calidad, como los de Garland, tendrás las herramientas que necesitas para lograr el resultado deseado.
Con los cortasetos eléctricos y a gasolina de Garland podrás darles a los setos la forma que quieras sin tener la sensación de que es una tarea complicada. Son precisos, ergonómicos y potentes, con unas cuchillas de acero de gran calidad y un sistema de doble engranaje con el que lograrás un corte limpio sin esforzarte demasiado. Además, también hay que destacar que sus motores te facilitan la labor gracias a la fuerza que desarrollan y a lo poco que pesan, mientras que las asas regulables te permiten adoptar posturas de trabajo cómodas y eficaces.