Un estudio realizado por un equipo de científicos del Grupo de Trabajo Ambiental (EGW, en inglés) ha puesto en el punto de mira a los productos de limpieza por emitir sustancias químicas peligrosas. La clave está en los Compuestos Orgánicos Volátiles (COV), que son perjudiciales para la salud, y que se encuentran en gran parte de ellos.
El estudio
El estudio ha hallado datos preocupantes sobre los riesgos potenciales para la salud de los productos comunes de limpieza del hogar tras haber analizado un total de 30 referencias, entre las que se incluyen limpiacristales, multiusos y ambientadores, entre otros.
El análisis realizado evidenció que los productos cotidianos pueden liberar cientos de compuestos orgánicos volátiles peligrosos, es decir, los llamados COV (Compuestos Orgánicos Volátiles).
En total, se detectaron 530 COV únicos en los 30 productos. De ellos, 193 eran potencialmente peligrosos para la salud. Entre los daños que se cree que pueden originar están afecciones sobre el sistema respiratorio, mayor riesgo de cáncer y efectos en el desarrollo y la reproducción.
Son efectos que, además, no son puntuales, puesto que se ha observado que algunos de los productos analizados emiten los COV durante varios días e, incluso, semanas y meses.
Otros impactos
Los COV no solo afectan a la salud de esta forma. También tienen otros impactos. Por ejemplo, afectan a la calidad del aire en interiores y exteriores. Este aspecto no es baladí. Se ha constatado que contaminan el aire interior de dos a cinco veces más que el aire exterior. Algunas estimaciones aún van más allá y apuntan a diez veces más.
Productos ecológicos
El estudio realiza alguna diferencia en el caso de los productos ecológicos. En general, se observa que emiten la mitad de COV que los convencionales. Los ecológicos sin fragancia son los menos COV emiten en comparación con los convencionales. En concreto, casi ocho veces menos.
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