Tecnología LED: la tendencia de iluminación que cuida del planeta

bombillas
En pleno siglo XXI, cada vez somos más conscientes de la situación actual del planeta y la importancia que supone contribuir al cuidado del medioambiente. La mayoría de nosotros estamos implementando procesos más respetuosos en nuestras tareas diarias como por ejemplo a la hora de consumir productos más naturales o reduciendo la cantidad de residuos que producimos.

Por otro lado, vivimos en la era de la tecnología, cada vez consumimos más electricidad y usamos distintos dispositivos electrónicos tanto en el trabajo como en el hogar. Teniendo en cuenta estos aspectos, es muy difícil cambiar nuestra realidad de consumo eléctrico y tecnológico, pero podemos fomentar el cuidado del planeta implementando tecnología verde en nuestro día a día. Es decir, podemos contribuir a reducir el consumo energético desde nuestro hogar. ¿Sabrías cómo? Te lo vamos a explicar a continuación.

Seguramente hayas oído hablar e incluso hayas comenzado a usar tecnología LED para la iluminación de tu vivienda, jardín o establecimiento. Sin embargo, la mayoría de las personas desconocen realmente los beneficios tanto personales como medioambientales que supone el uso de tecnología LED.

Existen tiendas especializadas en iluminación LED que te ofrecen una amplia gama de luces LED a un precio muy asequible que te permitirán convertir cada una de las estancias de tu hogar o establecimiento comercial en espacios de bajo consumo, con luz de calidad y respetuosos con el medio ambiente.

¿Qué beneficios tiene el LED para el medioambiente?

Eficiencia y ahorro energético

Las comparaciones son odiosas, pero es que las ventajas de una bombilla LED frente una incandescente son incontables. Las bombillas LED utilizan hasta un 90% menos de energía y esto se debe a que el 95% de la energía que consumen se transforma en luz y solamente el 5% se pierde en forma de calor, en el caso de las luces fluorescentes, los porcentajes son al contrario, desperdiciando prácticamente toda la energía en calor. ¿Nunca has tocado una bombilla y has pensado que quema demasiado? Este es el motivo.

Los LED necesitan menos energía para proporcionar la misma iluminación y se encienden al instante de accionar el interruptor sin que se pierda energía. Estos datos se traducen en ahorro energético, ya que al consumir menos energía se reduce la demanda de electricidad y las emisiones de gases tóxicos de modo que supone un beneficio de cara a preservar el cuidado de nuestro planeta.

También debemos que tener en cuenta que una reducción del consumo energético en la iluminación se traduce en un ahorro económico en la factura de la luz a final de mes y a lo largo del tiempo, ya que no es necesario cambiar las bombillas con tanta frecuencia como las convencionales.

bombilla-ahorro
Sin componentes tóxicos

Otra de las ventajas más importantes de las bombillas LED frente a la iluminación convencional, es que producen una luz ecológica libre de sustancias tóxicas.

Los fluorescentes que solemos ver como iluminación general tanto en oficinas, fábricas u establecimientos públicos están fabricados con metales pesados y contienen químicos nocivos como el mercurio. Este tipo de sustancias no son beneficiosas para nuestra salud y son contaminantes para el medio ambiente cuando los desechamos en los vertederos.

Las luminarias LED son reciclables y cumplen con la normativa ROHS lo que significa que no contienen sustancias como plomo, mercurio, cadmio o cromo. Del mismo modo, tampoco emiten rayos ultravioletas ni infrarrojos como ocurre en el caso de los fluorescentes y su ahorro energético permite que se reduzcan las emisiones CO2.

Además, las bombillas de luz LED están fabricadas con materiales más resistentes y de mayor calidad que facilita su duración a lo largo del tiempo lo que se traduce en una reducción de desechos residuales que inciden en el entorno.

Vida útil más larga
Las bombillas LED están diseñadas para tener una duración mayor que las bombillas convencionales, pueden durar hasta 20 veces más que las bombillas incandescentes o halógenas, de modo que no tendremos que cambiar nuestra bombilla tan a menudo y generar más residuos para el medioambiente.

La vida útil de una bombilla LED se estima entre 30.000 a 100.000 horas, pudiendo disponer de una bombilla LED durante 10 años.

bombillas-encendidas
A pesar de su larga duración, las bombillas no pierden la calidad de iluminación y su luz no es perjudicial para salud humana ya que las bombillas halógenas pueden provocar dolores de cabeza, fatiga ocular, falta de concentración…

Las lámparas LED te ayudarán a reducir el estrés y la ansiedad y aumentarán la capacidad productiva, por lo que son la mejor opción para iluminar espacios de trabajo que requieren de muchas fuentes de iluminación.

Ahora que conoces esta información, ¿A qué estás esperando para cambiar tus bombillas halógenas por bombillas LED?

Si miramos hacia el futuro, debemos ir adoptando tecnología verde en nuestras tareas y actividades diarias. Por ello, las tiendas de iluminación LED como León leds Iluminación te ofrecen infinitas posibilidades de iluminación ecológica para tu hogar o establecimiento.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *