Que las compras online han crecido durante los últimos años es algo más que evidente. Según datos proporcionados por CNMCData en España tuvo un crecimiento del 9,3 por ciento el último trimestre de 2020. Seguramente esta tendencia haya seguido al alza durante el 2021.
A este escenario se le añade las soluciones que existen en la actualidad para abrir una tienda online como las que propone Printful. Esto favorece aún más el desarrollo de las ventas web.
Una de las principales preocupaciones de la actualidad es si es posible comprar online de la manera sostenible. Ya existen multitud de empresas que se han sumado a esta tendencia ecológica para reducir el impacto medioambiental. Desde la elección de los materiales hasta la manera de envío siempre se busca la alternativa más respetuosa con la naturaleza.
Sin embargo, el principal obstáculo para conseguir que el ecommerce sea ecológico son los propios hábitos de los consumidores. Las tiendas virtuales han creado un mercado aún más competitivo donde los clientes son más exigentes. Los comercios tienen que cumplir con expectativas muy altas en cuanto, no sólo en la calidad del producto, sino también en los modos de entrega.
Una de las claves para comprar online de manera sostenible es tener unos hábitos de consumo acordes con una conciencia ecológica. A la hora de comprar debemos tener en cuenta ciertos aspectos como la huella de carbono que deja el transporte del producto que se ha adquirido.
¿Esto quiere decir que hay que dejar de usar el ecommerce? No, pero sí que hay que hacerlo de manera más sabia.
Cómo hacer uso del comercio online de manera sostenible
Una de las primeras cuestiones que nos debemos de plantear son los plazos de entrega. Muchos comercios en la web ofrecen servicios de entrega exprés como uno de sus principales atractivos. Sin embargo, es conveniente que pienses si realmente necesitas tu producto en tan poco tiempo.
Los servicios de transporte urgente pueden provocar que se usen medios de transporte que no estén completamente cargados. Es decir, se genera más contaminación por cada producto comprado. Así que si comprar online de manera sostenible debes evitar esta opción de envío.
Lo mismo ocurre con las devoluciones. Esta facilidad puede provocar que se compre de manera algo más despreocupada, pero recuerda que se multiplica la generación de carbono con cada transporte. Por eso, asegúrate de que lo que compras online es realmente algo que quieres. Sólo devuélvelo si realmente no cumple con tus expectativas, tiene desperfectos o no tiene la calidad ofertada.
La última gran cuestión es el embalaje. Puede comprobar en la tienda online si usan materiales ecológicos. También es más conveniente comprar varios productos en la misma tienda para que así se aprovechen las cajas en las que se transporta. También puedes solicitar que no se usen demasiados elementos para que se generen menos residuos.
Para que el comercio online sea sostenible aún se requieren superar muchos retos. La comodidad no está reñida con la conciencia ecológica. Tan sólo hay que tener claro que cada uno de nuestros gestos tiene su repercusión medioambiental.
A la porra con la sostenibilidad, me tenéis ya harto vosotros los ecologistas, nos están ustedes anulando y arrebatando nuestras libertades y haciendo que nos sacrifiquemos vamos.