Los veganos por convicción pueden ir plantando un banano en el balcón de casa si quieren asegurarse plátanos o bananas libres de sustancias animales, algo que podría ocurrir muy pronto si se extiende el uso de un spray que retrasa su maduración.
El spray que previene su excesiva maduración, razón por la que se pierden millonadas, es un aerosol en forma de hidrogel y contiene quitosano, una sustancia derivada de los camarones, las langostas y de las conchas de cangrejo.
Por contra, los veganos por obligación, es decir, por prescripción médica, no tienen de qué preocuparse, al menos, no por cuestiones éticas. Otra cosa sería que fueran alérgicos al marisco o al pescado y pudiera hacerles daño, pues aún está por determinar su seguridad médica..
La conveniencia de su uso y su eficacia ha estado debatiéndose durante la 244 sesión de la Sociedad Química Americana, en la que los científicos discutieron acerca de la posibilidad de empezar a utilizarlo en plan masivo.
Como es sabido, el problema de las bananas es su maduración rápida, hasta tal punto que son los alimentos más desperdiciados del mundo desarrollado. Así, la aplicación de este hidrogel hecho con alcohol polivinílico y quitosano, derivado del componente principal de las conchas de los mariscos (quitina), los mantiene frescos sin alterar su sabor durante doce días.
El hidrogel alarga la vida útil de los frutos gracias a que retrasa la absorción de oxígeno, es decir, el ritmo de maduración natural, tal y como demostraron recientemente sus inventores, científicos chinos de la Tianjin University of Science and Technology.
Por cierto, me pregunto si la solución para veganos podría pasar por una posible producción sintética de la quitina, un polisacárido que es el principal componente de las conchas de estos mariscos. Aunque la química tampoco es del gusto de un vegano que se precie…
En fin, en realidad, todo son interrogantes sobre la seguridad de su uso para la salud del consumidor. Por lo tanto, si plantamos el banano ahora, para cuando se apruebe su uso comercial, con un poco de suerte ya lo tendremos crecidito y en plena productividad.