El concepto de ecológico abarca muy distintos aspectos, y este invento parece conseguir la cuadratura del círculo. Se trata de un árbol virtual que absorbe CO2, sin generarlo por la noche y, aun siendo un artilugio, tampoco contamina a nivel paisajístico. Más bien al contrario, decora la urbe ofreciendo un lugar para el descanso y el relax visual.
Hablamos de «City Tree», un ingenioso invento diseñado por Green City, una empresa alemana que ha querido hacer un tres en uno de lo más ecológico. Su árbol, cuya forma parece más un jardín vertical que un árbol, consigue absorber la misma polución que lo harían un promedio de 275 árboles.
Mejora la calidad del aire
En cifras, un árbol artificial de este tipo, con sus 4 metros de alto por 3 de alto y unos 2 de ancho, absorbe 250 gramos de dióxido de nitrógeno por día.
Lo hace gracias a un filtro de aire fabricado con materiales vegetales, y tiene la ventaja de ocupar mucho menos espacio que los casi 300 árboles a los que sustituye. Eso sí, una arboleda tiene su encanto, lógicamente, pero es más díficil de integrar en plena ciudad.
En cuanto a su eficacia, sus creadores afirman que mejora la calidad del aire en los alrededores, más o menos en 50 metros a la redonda. Una interesante propuesta para el mobiliario urbano que busca integrar sumideros de carbono con bajo impacto ambiental en espacios urbanos convencionales.
Por último, un apunte sobre su funcionamiento, otro punto verde a su favor, puesto que cuenta con paneles solares instalados en su parte superior, por lo que son discretos. Es a través de la energía que generan como se puede producir electricidad, al tiempo que cuentan con un sistema de recolección de agua de lluvia. Eso sí, el precio es poco sostenible, pues cuesta la friolera de 24.000 euros, banquito incluido.