Aunque en el hemisferio norte hace ahora un tiempo helador, las marcas de ropa ya preparan la colección para la próxima primavera. En el caso de la compañía de ropa deportiva Puma, va a ser una colección respetuosa con el medio ambiente. Se trata de una nueva línea para gente aficionada al deporte que será biodegradable.
Los materiales de esta nueva colección de Puma están compuestos por fibras orgánicas a las que no se ha añadido ningún tipo de productos químicos tóxicos. Se usa, principalmente, algodón ecológico, y siempre se tienen en cuenta normas internacionales sobre la materia. Los artículos de la colección que no están hechos de material orgánico, se componen de materiales que provienen del reciclaje, como botellas de plástico PET recuperadas.
El nombre de la colección es InCycle. Puma ha pensado en todo el ciclo del producto. La ropa, una vez usada, no se debe tirar, sino que, gracias al programa Bring Me Back que ha puesto en marcha la compañía, se puede devolver a la tienda para transformarla en compost para que vuelva a la naturaleza. O, si no, pueden formar parte de una nueva materia prima con la que fabricar productos de poliéster o propileno reciclado.
De la cuna a la cuna
Los productos InCycle tendrán, por tanto, certificación Cradle to Cradle (de la cuna a la cuna). Es un gran paso por parte de Puma para reducir su huella ambiental y ofrecer a los consumidores productos más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente. La empresa de ropa deportiva ha calculado que el impacto sobre el medio ambiente de estos nuevos productos es un tercio menor que el de sus equivalentes convencionales.
La colección InCycle de Puma, según la propia empresa, es un ejemplo en cuanto a lo que los consumidores pueden esperar y a lo que las compañías de la competencia y, en general, la industria textil, puede ofrecer: productos con un bonito diseño y respetuosos con el medio ambiente al ser biodegradables. Ojalá cunda el ejemplo.