La multinacional energética BP desarrolló una tecnología de reciclaje mejorada, que lleva por nombre BP Infinia y posibilita que los residuos plásticos de tereftalato de polietileno (PET) se desvíen de los vertederos o de la incineración. De manera que, lo transforma en nuevas materias primas y de calidad virgen.
El plástico PET es un polímero que se obtiene a partir del etileno y el paraxileno. Es el plástico más utilizado para el envasado rígido de bebidas y alimentos, por lo tanto, es totalmente reciclable. Este material es procesado a pesar de que posee alta dureza y es muy resistente a los químicos, a la rotura y el fuego.
Tecnología BP Infinia
Aproximadamente 27 millones de toneladas de PET al año se utilizan en todo el mundo, de los cuales un 85% se utiliza en las botellas. Sin embargo, menos del 60% se recicla y solo el 6% del total se devuelve en forma de nuevas botellas.
En el caso de la tecnología BP Infinia fue creada para convertir los residuos plásticos de PET difíciles de reciclar en materias primas, por ejemplo: las bandejas negras de comida y las botellas de colores. Esta materia prima es comparable a las fuentes tradicionales de hidrocarburos.
De acuerdo con el vicepresidente de Tecnología Petroquímica, Licencias y Desarrollo de Negocios, Charles Damianides, «esta innovación puede contribuir definitivamente a hacer que todos los tipos de residuos de poliéster sean infinitamente reciclables».
Evolución tecnológica Este material es transformado mediante varios procesos, tales como: extrusión, inyección, inyección-soplado y termoformado. Para lograr una correcta transformación la compañía destinó una inversión de 25 millones de dólares, a fin de construir una planta piloto en EEUU, donde se dedicarán a probar la tecnología antes de comercializarla a nivel global.
La nueva planta piloto de BP tendrá su sede de centro de investigación y desarrollo en Naperville, Illinois. El objetivo es que esté operativa a finales de 2020 para probar la tecnología de forma continua y finalmente distribuirlas, para evitar que miles de millones de botellas terminen en vertederos o incinerados cada año.
Crecimiento económico y tecnológico
«Consideramos que nuestra tecnología Infinia cambia las reglas del juego para el reciclaje de plásticos PET. Es un paso importante para permitir una economía circular más fuerte en la industria del poliéster y ayudar a reducir los residuos plásticos no gestionados», destacó el director ejecutivo de BP Downstream, Tufan Erginbilgic.
En países como México creció la consolidación de industrias dedicadas a transformar materiales reciclables, que suman alrededor de tres mil empresas. Además, son generadoras de empleo con al menos 250 puestos directos y 800 mil indirectos.
«La tecnología ha avanzado de tal manera en el sector de reciclaje que es capaz de detectar los materiales secos y húmedos, así como los no adherentes según su densidad. Otras maquinarias también tienen la función de separadores ópticos por medios de procesos infrarrojos que diferencia el material reutilizable de otras impurezas», explicó el experto en tecnología sostenible y CEO de Techspring.mx, Camilo Fuente.