Las bolsas reutilizables son un gran invento para el cuidado del medio ambiente, y lo mismo cabe decir de las compras libres de envases. Sin embargo, estas bolsas verdes pueden perjudicar nuestra salud si llevan un tiempo utilizándose y no se han lavado convenientemente.
La necesidad de una limpieza regular parece algo evidente, pero no lo es tanto porque a simple vista puede parecernos que están más o menos limpias. Sin embargo, ya sean de tela o de cualquier otro material, y sobre todo si su uso es alimentario, lo cierto es que utilizarlas una y otra vez hace que acumulen peligrosos microorganismos.
La advertencia no sólo es de sentido común, algo palmario, sino que también cuenta con el respaldo de la ciencia. Son varios los estudios que han concluido al respecto que se trata de una situación peligrosa pero fácil de prevenir, ya que basta con una limpieza regular para evitar problemas de salud.
La importancia de lavarlas
Las bacterias que transmiten los alimentos son del tipo de E. coli u otras que podrían provocarnos enfermedades o trastornos de la salud de mayor o menor gravedad, según descubrieron científicos estadounidenses. Estudios realizados por la Universidad de Arizona y la Universidad de Loma Linda no sólo hallaron este tipo de peligros, sino que además constataron que las bolsas que se reutilizan para transportar comestibles no suelen lavarse y pueden ocasionar problemas de contaminación cruzada entre alimentos que entren en contacto por carecer de envases.
Si se utilizan a diario, una limpieza semanal es importante, sin olvidar un minucioso secado, que será perfecto si las tendemos al aire libre vueltas del revés. En particular, hay que tener en cuenta la humedad de cada zona, ya que los climas más húmedos son un caldo de cultivo idóneo para la proliferación de bacterias.