Un chico de 18 años, Justin Beckerman, ha diseñado y construido, en tan sólo seis meses, un submarino fabricado a partir de desechos. Lo ha bautizado como Nautilus, en un claro homenaje a la embarcación del capitán Nemo, el personaje protagonista de Veinte mil leguas de viaje submarino, de Julio Verne. Ha costado 2.000 dólares (poco más de 1.500 euros) y tiene capacidad para una persona.
Para construir el Nautilus, Justin ha usado materiales de desecho, como tuberías de drenaje y un tragaluz reciclado. Según el propio diseñador, el submarino ecológico puede sumergirse hasta una profundidad de 9,1 metros. Ya ha realizado tres pruebas, todas con éxito. Justin lleva inventando y construyendo cosas desde que tenía dos años, según su madre, Jess.
El submarino cuenta con tanques de lastre para ganar profundidad y mantener la estabilidad. También tiene salidas de aire para proporcionar oxígeno al único posible marinero a bordo. Completan el equipamiento, los sistemas de emergencia: baterías de respaldo, una sirena, luces estroboscópicas, un aparato de respiración y una bomba para evitar fugas de agua.
Este pequeño submarino puede estar bajo el agua durante dos horas. La velocidad máxima que puede alcanzar es de 2,4 km/h. ¿Poco? Suficiente para que su inventor recorra el lago que hay cerca de su casa, viendo los peces y otra fauna y, quizá, algún resto histórico.
Modelo mejorado
En su web se pueden ver esta y otras invenciones, algunas de las cuales han ganado premios. Para fabricar sus aparatos usa dispositivos tecnológicos que su familia y amigos van a tirar a la basura o bien los recoge de contenedores o almacenes de reciclaje. Por ejemplo, los reguladores y manómetros (que miden la presión) del Nautilus provienen de una vieja fuente de sodas que un restaurante había desechado, mientras que las dos baterías principales están recicladas de juguetes.
El Nautilus es el cuarto submarino construido por Justin Beckerman. El modelo anterior podía sumergirse hasta los 1,5 metros y estaba hecho con contendedores de plástico y cinta adhesiva. Era propulsado por dos motores de scooters y dos baterías de 12 voltios.
esto….me gusta. =)