Arte con residuos plásticos


El arte que busca sorprender y denunciar expresa por doble partida. En este caso, los cuadros llegarán más o menos por su calidad, pero con total seguridad logran dar un buen aldabonazo a las conciencias. ¿Su mensaje? Es muy sencillo: los residuos plásticos más cotidianos asfixian la naturaleza, pero tienen un gran potencial como elementos decorativos.

Sus autores son Harry DeLome y Rachel Green, un par de artistas de Georgia que han agrupado sus obras en una exposición titulada Post-Consummed, recientemente mostrada en la Cultural Arts Gallery de la ciudad de Savannah. Por un lado, Harry utiliza trozos de plástico que encuentra en los ríos para hacer obras basadas en imágenes de Google Maps.

Pero esto no es todo. Más allá de estos cuadros murales, Delome ha firmado otras obras de arte llevadas a cabo gracias al reciclaje. Entre sus objetos más funcionales destaca una lámpara hecha a partir de 120 encendedores. Por su parte, Rachel Green hace lo propio con herramientas y juguetes de plástico desechados.

Reciclar para concienciar

Observar los cuadros de la colección Post-Consumed permite reflexionar acerca de las terroríficas islas de plástico que contaminan los océanos, las vías fluviales y, en general, el medio ambiente. Si contemplamos su abigarramiento en el museo donde fueron expuestos las obras, una ciudad del estado de Georgia, entonces podemos sentir muchas otras sensaciones. No en vano, Savannah es la capital del condado de Chatham, y está situada a orillas del océano Atlántico, junto a la misma desembocadura del río Savannah, los dos lugares donde se ha recolectado el plástico.


Ambos artistas tienen una especial sensibilidad por los temas de denuncia social. En los últimos 25 años han realizado construcciones de lo más variopintas, como reciclar artículos de consumo. El reciclaje de electrodomésticos viejos, por ejemplo, les permite abordar temas tan distintos como los roles de género o las relaciones entre las personas y los objetos. Un arte inteligente que quiere enseñarnos ser más respetuosos, a vivir mejor.

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