Casa de invierno integrada en la naturaleza


Las casas de montaña que se integran en el entorno no sólo han de ser como las de los hobbits, y éste es un claro ejemplo de las maravillas que pueden construirse sin necesidad de romper el paisaje. Se ubica en Canadá, y además de respetar ese aspecto está fabricada con materiales sostenibles y tiene una pinta estupenda.

Diseñada y levantada por YH2 Architects, esta morada se encuentra en un bosque de Quebec y, en cuanto a sus materiales, además de madera certificada de cedro, nogal y roble, se juega con las cristaleras para establecer una comunicación constante con el exterior en todas sus estancias.

El interior es diáfano, con puertas correderas de gran tamaño que facilitan la creación de espacios con mayor intimidad pues, de hecho, está pensada para esta adaptación con el fin de albergar a familias numerosas o, por ejemplo, a unos cuantos invitados.

Disfrutar del invierno

Asímismo, la madera como revestimiento interior en paredes, suelos y techos ayuda a crear un clima confortable, y lo mismo puede decirse de la moderna chimenea que cuelga del techo en la sala central.

En contraste con la chimenea, un elemento estrella de la casa, no lo es menos la sauna con jacuzzi que relaje y desentumezca en un entorno realmente frío. Es más, este se ha colocado justo a ras de suelo, para intensificar la sensación de estar inmerso en un hábitat natural. ¿Porque, no es maravilloso disfrutar de la nieve sin tener que sufrirla?


Aunque es una casa pensada para pasar temporadas de invierno en compañía, rodeados de una fantástica nieve en un hogar de lo más acogedor, también es perfecta para los veranos y, en fin, para pasar todo el año, bien lejos del mundanal ruido.

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