Aunque la limpieza doméstica bio nos resulte una idea interesante, solo llevándola a la práctica conseguiremos dejar a un lado la química y, en fin, optar por un estilo de vida más saludable y respetuoso con el medio ambiente.
Como ocurre con todo aquello que nos resulta desconocido, dar ese primer paso suele costar. En este post intentaremos ponértelo un poquito más fácil dándote un par de sencillas recetas para hacer tu propio limpiador ecológico multiusos.
Un multiusos casero y bio
La gran ventaja de tener siempre a mano un spray tipo pistola con nuestra fórmula, siempre lista para aplicar, es poder decir adiós para siempre a los multiusos de siempre destinados a la limpieza del hogar. Sin necesidad de andar buscando ingredientes ni improvisando una fórmula ecológica, lo tenemos listo para usar…
De hecho, es una de las formulaciones más populares para su realización en casa precisamente por eso. La comodidad manda, sobre todo en este mundo nuestro, tan acelerado, en el que los productos de limpieza de base sintética buscan hacernos la vida más fácil.
Para hacernos un multiusos casero y bio, empecemos por conseguir ese envase pulverizador y preparémonos para llenarlo con una fórmula que se hace en un abrir y cerrar de ojos.
Como ingredientes, tan solo necesitaremos agua, bicarbonato de sodio, vinagre blanco y aceites esenciales. Mezclaremos en medio litro de agua caliente dos cucharadas soperas de bicarbonato, cuatro de vinagre y una cucharadita de café del aceite esencial.
Si te preguntas qué aceite esencial elegir, la respuesta dependerá de tus gustos y utilidad. Los aceites esenciales cítricos, por ejemplo, además de oler bien y dejar un aroma a limpieza muy agradable son desinfectantes.
Los aceites esenciales son todo un mundo por descubrir. Eso sí, solo serán ecológicos si los elijes de tipo bio. En caso contrario, por muy naturales que parezcan, podrían llevar algún que otro conservante o componentes artificiales, sino que además no procederá de la agricultura ecológica.
Lo mismo cabe decir, por otra parte, de otros ingredientes, como el mismo vinagre blanco. Idealmente, deberíamos elegirlo bio. En lo que respecta al bicarbonato de sodio, su cualidad de biodegradable lo convierte en una buena elección sin necesidad de logos verdes.
Si queremos un multiusos más jabonoso, podemos rallar un trozo de pastilla de jabón tipo lagarto (es biodegradable) o de algún otro jabón hecho por nosotros y añadirle vinagre. En este caso, una vez aplicado habríamos de enjuagar.
En ambos casos, justo antes de aplicarlo puede ser necesario agitar la botella para que los ingredientes se mezclen bien y tengamos una mezcla uniforme. Sobre todo, cuando en la fórmula haya aceites esenciales que suelen quedarse en la superficie. Por lo demás, no es necesario conservarlos en la nevera, pues no contienen productos orgánicos frescos que puedan descomponerse.
Con estos multiusos podemos limpiar muy distintas superficies, como el acero inoxidable, madera, baño, cristales e incluso la misma vajilla. Por lo demás, una vez empecemos con ello, podremos ir variando los ingredientes según nuestras necesidades (aumentar el vinagre para un efecto desengrasante, por ejemplo) y preferencias e incluso tener varios sprays listos, con sus respectivas etiquetas o de diferentes colores para facilitar su diferenciación.
Por último, son frecuentes las dudas sobre la efectividad de estos limpiadores caseros. ¿Acaso pueden ser suaves con el entorno y duros con la suciedad? Así es, ser biodegradables no significa que su poder de limpieza sea deficiente. Muy al contrario, tanto el bicarbonato como el vinagre blanco, pongamos por caso, son desinfectantes muy efectivos, de tal modo que no precisamos nada más allá para conseguir una buena higiene doméstica.