La compañía Endesa ha estrenado el edificio que será el Centro de Control de su Smartcity Barcelona y laboratorio de ideas sobre eficiencia energética, ciudades inteligentes y smart grids (redes inteligentes). Se trata de un innovador edificio solar, diseñado por el Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña y promovido por Visoren. Se presentó en el SmarCity Expo World Congreso.
El edificio está construido con madera, fue levantado en tan sólo un mes y es un edificio «cero CO2». Su planta tiene una superficie 154 metros cuadrados. La clave de la sostenibilidad en las ciudades, según los responsables de este edificio es compartir datos, redes y circuitos de informaciones, productos, agua, energía e, incluso, movilidad.
Esa sostenibilidad basada en la producción local y autárquica debe dar otro paso más hasta conseguir que los propios ciudadanos conviertan sus viviendas en instalaciones de energía renovable y a toda la ciudad en una factoría de productos para su propio consumo.
El pabellón solar cuenta con ochenta módulos solares Perform Poly 235, que están instalados sobre la cubierta del edificio y que son capaces de generar 25 MWh al año. El pabellón necesita, de media, aproximadamente 4.100 kWh/mes, por lo que su balance es de cero emisiones de CO2. El pabellón se utilizará hasta final de 2012 como centro de control, recinto para foros de debate y laboratorio de investigación e innovación, abierto a terceras empresas en el marco del proyecto Endesa Smartcity Barcelona.
En su sala de exposiciones se pueden ver iniciativas Smartcity de Endesa, como el desarrollo de la electromovilidad y puntos de recarga, la gestión remota del suministro eléctrico con telecontadores digitales o el alumbrado público eficiente.
El edificio, por otra parte, supone una imaginativa adaptación a la eficiencia energética mediante el añadido de una serie de módulos en su fachada. Estos módulos, que son vistos en sección como piezas triangulares, permiten que el edificio obtenga una inteligencia energética y espacial. Sus dimensiones y componentes varían en función de la orientación e inclinación del Sol, de la relación con el entorno y otras necesidades técnicas.