A pesar de la necesidad de proteger el entorno marino y los diferentes ecosistemas y especies animales y vegetales y de las diferentes medidas implementadas, lo cierto es que las zonas marinas en Europa no están bien protegidas. La voz de alarma la ha lanzado el Tribunal de Cuentas Europeo en un nuevo informe especial. En sus páginas, se indica que la acción de la Unión Europea no ha permitido la recuperación de ecosistemas y hábitats marinos significativos.
El informe
Una de las conclusiones de este informe es que el marco de protección del entorno marino no profundiza lo suficiente en la restitución de los mares para que tengan un buen estado medioambiental.
Además, también se indica que los fondos de la Unión Europea rara vez se apoyan en la conservación de especies y hábitats marinos. De hecho, las zonas marinas protegidas ofrecen una escasa protección real en casos de, por ejemplo, sobreexplotación pesquera sobre todo en el mar Mediterráneo.
El informe continúa explicando que la acción de la Unión Europea no ha podido hasta el momento restituir los mares de Europa a un buen estado ambiental, a pesar de su importancia económica, social y medioambiental. Tampoco se ha conseguido que la pesca retorne a niveles sostenibles.
Los datos ponen de manifiesto que la Unión Europa ofrece protección limitada a la biodiversidad marina. En concreto, las zonas protegidas superan las 3.000, pero el estudio pone de manifiesto que es una red de protección que, pese a ser extensa, es poco profunda.
Compromisos
Esta falta o ineficiente protección se produce a pesar del compromiso de la Unión Europea de proteger el entorno marino a través de las políticas medioambientales y de pesca.
Entre estas medidas, por ejemplo, figura la creación de una red de zonas marinas protegidas. Todas las acciones están recogidas en la Directiva marco sobre la estrategia marina y en las Directivas sobre aves y hábitats.
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