La seguridad de los cosméticos es una cuestión que importa sobremanera a los ciudadanos, sobre todo cuando los usuarios son los más pequeños de la casa. En esta ocasión, estamos de enhorabuena, pues Johnson & Johnson ha anunciado la modificación de la fórmula de alrededor de un centenar de sus productos para bebés que comercializa en todo el mundo para eliminar sustancias potencialmente cancerígenas como el quaternium-15 o el 1,4-dioxano.
Finalmente, la presión ejercida por el consumidor sobre la multinacional está consiguiendo que sus productos sean más seguros está empezando a dar sus frutos. En concreto, ha sido gracias a la Campaña por la seguridad de los cosméticos (Campaign for Safe Cosmetics) que viene llevándose a cabo desde 2009.
Compromiso antes del 2015
Como es sabido, el quaternium-15 es un conservante químico que libera formaldehído y aunque la cantidad de formaldehído es muy pequeña, tanto que se podría considerar segura para su uso humano, siempre sería mejor no incluir este componente. Es decir, buscar alternativas más inocuas.
Además, la compañía se ha comprometido a eliminar o limitar otros químicos potencialmente tóxicos en su línea de bebés y en productos para adultos antes del 2015 ( el formaldehído, el 1,4-dioxano, el triclosán, los ftalatos o los parabenos). Aunque, por ejemplo, lo ideal la eliminación de todos los liberadores de formaldehído de los productos para adultos, algo que ser hará «siempre que sea posible.»
Por su parte, esta campaña sigue presionando a otras marcas para conseguir resultados similares, exigiendo también una mayor claridad informativa en los etiquetados, actualmente demasiado ambiguos y oscuros, pues además esconden información de gran importancia para el consumidor. Una vez obtenido este gran éxito, esta iniciativa impulsada por la coalición de 175 organizaciones sin ánimo de lucro, cuenta con el respaldo de más de 1,7 millones de miembros.