Se ha instalado, en un nuevo acceso al municipio madrileño de Alcalá de Henares desde la M-300, un asfalto realizado con plásticos y caucho de neumático reciclados. La Comunidad de Madrid ha participado en el proyecto europeo de I+D, que ha contado con una inversión de 16 millones de euros.
Con la nueva carretera se quiere mejorar el acceso por carretera de los 45.000 vehículos diarios que circulan por allí, de modo que los vecinos de la zona se ahorren millones de horas al año en sus desplazamientos diarios.
Lo más novedoso de la nueva carretera son los materiales utilizados para su construcción. Se ha utilizado, de forma pionera, un tipo de material que procede del reciclado de plásticos y caucho de neumáticos, una innovación surgida de un proyecto de investigación que tiene por objetivo desarrollar nuevos materiales de construcción mediante el reciclado de materiales usados, así como comprobar su efectividad en entornos reales.
Dentro del proyecto, la carretera M-300 ha sido la primera en la que se ha extendido de forma experimental este nuevo tipo de asfalto. Hasta ahora, sólo se había realizado algunas investigaciones de carácter teórico en países como Reino Unido o la India. Es la primera vez que se utiliza este tipo de material en una obra para ser utilizado diariamente.
El material se denomina Polymix y el proyecto se ha desarrollado dentro del proyecto Life+, financiado por la Unión Europea y dirigido a promover iniciativas de carácter medioambiental. Participan también la Universidad de Cantabria, Acciona y el Centro de Innovación y Tecnología AIMPLAS.
El tipo de asfalto que se ha desarrollado emplea desechos que de otro modo deberían trasladarse a vertederos o usarse como combustible. Pero, además, ofrece algunas ventajas al ser utilizado en infraestructuras viarias, puesto que mejora la resistencia del asfalto, lo que supone una menor necesidad de mantenimiento, y permite reducir el consumo de asfalto, lo que también supone un ahorro económico.