A falta de Naturaleza dentro del hogar, decorar con el color verde ayuda a sentirla cerca. Lógicamente, si se color nos lo traen las plantas o los paisajes, mejor que mejor. Veamos algunas ideas prácticas para hacerlo sin necesidad de éstos.
En este post nos centramos en la sensación que transmite a nivel cromático. Y es que el color verde tiene un efecto casi mágico en nosotros. Su vínculo con la Naturaleza y el aire libre es muy estrecho, y gracias a ello podemos crear atmósferas más confortables, que nos aporten una agradable sensación de bienestar.
Hogar, verde hogar…
Lso colores, como es bien sabido, tienen su significado y provocan diferentes sensaciones. Si apostamos por los verdes, en combinación con tonos neutros como el blanco, hueso, beiges o color marfil, conseguiremos activar una parte de nuestro interior que nos pone en contacto con la Naturaleza.
El verde es un color fresco y natural, que crea una atmósfera tranquila y relajada. Simboliza la Naturaleza, la salud y en cierto modo también la alimentación e incluso la fertilidad. Es ideal para usar en salas de estar y cocinas, pero no por ello hemos de dejar de darle protagonismo donde nos apetezca. También los dormitorios son una estancia perfecta para hacer que los tonos giren en torno a los verdes.
En combinación con otros colores obtendremos otros resultados añadidos muy interesantes. Por ejemplo, el amarillo nos aporta optimismo, creatividad y felicidad, el púrpura es romántico y femenino, a la par que relajante. El azul, por su parte, transmite paz y serenidad, mientras el marrón es un tono terroso que también nos conecta con la Tierra.
Por su parte, el rojo simboliza la pasión y el amor. Sus combinaciones, por lo tanto, nos ayudarán a ser creativos y construir atmósferas. Si no queremos fallar, combinar los colores neutros más claros (el blanco, por ejemplo, transmite la sensación de pureza y simplicidad) con el resto para dar un toque de color es lo más sencillo. Y, en el caso del verde, aportarán luminosidad y limpieza.
De hecho, mirar imágenes verdes durante unos minutos nos ayudan a relajarnos. Salvando las diferencias, logramos una sensación similar a que nos proporciona la Naturaleza real. Básicamente, se trata de encontrar sustitutos que engañen a nuestro cerebro.
Algunos estudios han concluido que la experiencia virtual resulta muy reljante. Nos puede ayudar a conseguirlo desde un poster, fondos, fondos de pantalla… Igualmente, el color verde nos ayuda a sentir esta misma sensación, y lo mismo cabe decir de los sonidos de la Naturaleza, aunque sean enlatados.
Además de jugar con el verde de forma estratégica para mejorar la sensación de Naturaleza, lo suyo es compaginar este tipo de decoración con una serie de medidas relacionadas con el cuidado ambiental del hogar. De este modo, lograremos potenciar una cosa con la otra.
Es decir, respiraremos más saludable, y también tendremos una «visión» verde, con lo que crearemos sinergias positivas muy interesantes. Idealmente, la elección de los muebles y de otros materiales debería ser ecológico. No en vano, optar por ellos es otra manera de cuidar la calidad ambiental.
Se trata, en definitiva, de mejorar la calidad de nuestro hábitat haciendo una serie de elecciones adecuadas, entre las que las notas de color verde pueden ser de gran utilidad para alcancar el objetivo. Tanto en el hogar como en cualquier otro espacio cerrado, como un negocio o la oficina, pongamos por caso, combinar estos elementos puede mejorar de forma sustancial nuestro espacio cerrado.