Los consumidores tienen cada vez más en cuenta criterios ecológicos a la hora de adquirir un producto. La marca Sony Ericsson tiene muy en cuenta este factor de compra y quiere destacarse como la empresa de teléfonos móviles más respetuosa con el medio ambiente. Además es una forma de llamar la atención de los chicos de Greenpeace cuando elaboran su lista de las marcas más ecológicas.
Uno de los modelos presentados por Sony Ericsson es el teléfono ecológico J108A CedarTM. Este modelo se ha fabricado con plástico reciclado, reduciendo el consumo de energía, evitando la producción de nuevo plástico y, en definitiva, reduciendo las emisiones de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera.
Además, el Sony Ericsson J108A CedarTM se fabrica con pintura de base acuosa, menos peligrosas para el medio ambiente y para la salud humana. El manual de uso no se imprime en papel, con lo que se ahorran 350 toneladas de papel por cada millón de terminales, lo que supone no talar miles de árboles y no gastar miles de litros de agua. El cargador es de bajo consumo y las cajas donde se transportan son muy compactas, permitiendo enviar más teléfonos en cada carga y reducir la emisión de CO2 por el transporte.
Con el respaldo de Greenpeace
No es el único modelo de móvil ecológico de Sony Ericsson. Según Greenpeace, el modelo Aspen fue el más ecológico del mercado. Cuenta con sistema operativo Windows Mobile, pantalla táctil de 2,4 pulgadas, una cámara de 3,2 megapíxeles, conexiones wifi, HSPA y Bluetooth. La carcasa es de plástico reciclado en un 50%. El embalaje es biodegradable. El cargador no contiene productos químicos dañinos para el medio ambiente. El manual de instrucciones sólo se publica en formato digital. Además cuenta con una aplicación llamada EcoMate que ofrece consejos ecológicos al usuario, como animarle a caminar en vez de coger el coche, al tiempo que informa de las calorías gastadas y la cantidad de CO2 que no emite.