Philips desvela planes para su primer producto verdaderamente comercial de Lumiblade, nombre del sector que desarrolla la compañía para la aplicación de la tecnología OLED (Organic Light-Emitting Diode) en un sinfín de espacios y lugares. Se trata de su primera lámpara de escritorio con esta tecnología ecológica.
Con este paso, podrían empezar a desplazarse las también ecológicas luces LED, que quedarían poco a poco relegadas por la tecnología OLED, hoy por hoy considerado el futuro de la iluminación. Sólo hay que superar algunos obstáculos de viabilidad para que su uso se generalice, y esta lámpara podría ser un gran paso adelante.
Philips, uno de los mayores impulsores de esta tecnología emergente, dio a conocer los planes para lanzar Moorea, su primera lámpara de OLED de escritorio, tipo flexo. Creada por Daneil Lorch, un joven diseñador industrial de Berlín, Moorea es la versión acabada de su primer diseño concebido para una lámpara con OLEDs presentada a la compañía de forma bastante casual pero con gran éxito, finalmente.
Recordemos que la tecnología OLED genera luz cuando la electricidad pasa a través de un material orgánico semiconductor, montado en capas de moléculas orgánicas que emiten luz cuando se activan mediante una corriente eléctrica en la superficie de que se trate. El resultado es una iluminación eficiente, duradera y más sostenible que las luces más convencionales.
Sus usos decorativos son casi infinitos, tanto para integrar luces en distintas superficies (ventajas, paredes, muebles) con fines de creación arquitectónica como de diseño posterior a la construcción, a nivel doméstico, en hoteles o también en mobilidario urbano. Se trata, en suma, de una fuente de luz muy distinta que, gracias a su baja temperatura de alrededor de 30 grados centígrados multiplica su potencial a la hora de aplicarlo.