El eucalipto tiene mala prensa, eso es más que evidente. Los falsos mitos le están haciendo mucho daño y hay quienes consideran que no debería formar parte de la gestión forestal. Sin embargo, hay que romper una lanza a su favor por todos los beneficios que es capaz de aportar a la sociedad.
En las cortas de madera con destino industrial que se producen en los montes gallegos, el eucalipto es el que más peso tiene, superando a las coníferas y al resto de frondosas. En 20 años se han duplicado las cortas de este árbol de la familia de las mirtáceas, algo que habla por sí solo de la importancia que tiene.
Un árbol con mucho peso en Galicia y Asturias
De toda la superficie forestal gallega y asturiana, el eucalipto ocupa un 83% y representa el 54% de las cortas de madera sumando las de ambas comunidades autónomas. El eucalipto es fundamental para la producción de celulosa, cuyos principales usos son el papel de cocina, el papel higiénico, etc.
El eucalipto, al ser un árbol de gran valor medioambiental, puede convertirse en un aliado del desarrollo económico y social. Debería ser uno de los imprescindibles de la gestión forestal sostenible, que sin duda alguna es uno de los instrumentos que se pueden utilizar para luchar contra el cambio climático.
Beneficios de la gestión forestal
La gestión forestal genera muchos beneficios, algunos de los cuales mencionamos a continuación:
– Fijación de CO2
– Mejora la eficiencia del uso del suelo y aumenta la disponibilidad para otros usos
– Materias primas para bioproductos
– Se regula el ciclo del agua
– Reduce el riesgo de incendios
– Reducción de los procesos erosivos
No son pocos los países que están trabajando en asuntos fundamentales que tienen que ver con la gestión de los bosques. Gracias a ello se han desarrollado herramientas muy eficaces para impulsar la gestión sostenible, lo que ha dado lugar a una política forestal regional conocida como Forest Europe. De ella se desprenden directrices, criterios e indicadores con los que alcanzar un equilibrio económico, ambiental y social de los bosques.
La certificación forestal
La certificación forestal es un proceso que sirve para evaluar propiedades y empresas forestales que se lleva a cabo a través de una empresa independiente. Se verifica que la gestión forestal cumpla con los estándares ambientales, sociales y económicos. Unos estándares que se han fijado a nivel internacional y que sirven para todos los sectores implicados. La certificación se obtiene mediante un sello o etiqueta y hay dos tipos: Forest Stewardship Council (FSC) y Programme for Endorsement of Forest Certification Schemes (PEFC).
#CoñecementoParaTodos
Sobre gestión forestal y otros temas relacionados con el medio ambiente hay mucho desconocimiento. Los ciudadanos no siempre reciben información contrastada y eso es algo que da pie a falsas creencias. Por ello ha nacido #CoñecementoParaTodos, una iniciativa creada por personas con una amplia base científica que se encargan de divulgar información que sí ha sido contrastada.