Mini jardín de mesa

La primavera ha explotado por doquier, y quizás ahora sea el momento perfecto para llevar un poquito de vida a nuestro hogar recurriendo a la técnica de los terrarios, un auténtico mini jardín doméstico que alegrará cualquier espacio interior.

Hacerlos es cuestión de minutos, siempre y cuando dispongamos del material necesario, que también es muy sencillo. Para realizarlo, nos bastará con contar con un poco de tierra, un contenedor o recipiente abierto de cristal transparente, unas cuantas piedras tipo gravilla, arena blanca o de otro color y las plantas en sí.

En realidad poco hay que decir a la hora de dar indicaciones sobre el paso a paso. Por si lo desconoces, apuntaremos que interesa un recipiente de tamaño mediano, el cual rellenaremos con una capa de piedras para drenar el riego, cubierta a continuación con la tierra suficiente para mantener las plantas. Finalmente, tras colocarlas, opcionalmente se añade una fina capa de arena blanca alrededor de las mismas.

Cáctus o plantas suculentas

En cuanto a las plantas más adecuadas, lógicamente preferiremos las que tengan raíces superficiales. En estos terrarios, concretamente, se utilizan mucho los cactus por ser muy agradecidos o, si lo prefieres, las plantas suculentas son otra gran opción, por aquello de ser más resistentes y precisar de poco riego, sin tener que renunciar a las flores en ninguno de los dos casos. Sin embargo, cualquier otra planta sirve, en principio.

Si buscamos una versión ecológica, habremos de buscar alternativas a la compra de los distintos elementos, tanto en plantas como en el recipiente y la tierra o gravilla. Con un poco de paciencia, será fácil ir reuniendo los materiales necesarios mediante el reciclaje para hacer un mini jardín de mesa o estantería de lo más resultón. ¿Qué, te animas?