La manera más habitual de acabar con el consumo vampiro es desenchufar cuando no se utiliza un aparato eléctrico y nunca dejar el modo de espera o standby. Su característica lucecita roja supone un derroche innecesario, justo lo contrario que hace ahora otra de color azul que luce el nuevo cargador ZERO, cuya particularidad es no consumir energía cuando se queda enchufado y hemos desconectado el teléfono.
El invento acaba con el problema de gastar energía cuando el cargador sigue enchufado pero sin el dispositivo, con la consiguiente subida de la factura de electricidad. Es un gasto igual de inútil que cuando mantenemos enchufado al cargador el móvil que ya se ha cargado, pero en esta ocasión se centra en el primero de los casos.
Su activación es inmediata: el cargador detecta que no hay teléfono conectado y se corta al momento la fuente de alimentación eléctrica. Así de sencillo y de práctico, sobre todo para aquellos que se dejan el cargador enchufado durante días, con el resultado anual de un buen puñado de dinero gastado en balde a lo que se suma una agresión ambiental.
Eficiencia y embalaje verde
El cargador lo comercializa la firma AT & T y según la casa su punto fuerte es que tiene un precio similar al de otros cargadores, con la diferencia, claro está, de que finalmente acaba siendo más barato porque nos ahorra dinero desde el minuto uno y a largo plazo. Además, desde un punto de vista verde, su embalaje es de papel reciclado, tienen un diseño compatible con los teléfonos móviles actuales y su sistema de carga es más eficiente que los modelos actuales.
Recordemos que el consumo de energía vampiro se produce en todo tipo de aparatos eléctricos que tengan modo de espera, así como en muchos otros que siguen chupando energía a pesar de no estar funcionando por ser alimentados con cargadores. La mejor manera de evitarlo es desenchufar manualmente cada aparato cuando no se utilice o utilizar regletas con interruptor de encendido y apagado.