Plantar tomates en el desierto


Muchas zonas del planeta están cubiertas por desierto, roca o hielo. En otras palabras, no se puede cultivar en ellas. O es muy difícil y costoso. Son lugares que no pueden producen sus propios alimentos. Por tanto, las personas que viven allí importan alimentos, lo que supone emisiones a causa del necesario transporte de las mercancías.

Por ejemplo, los países del Golfo Pérsico importan un 90% de los alimentos que necesitan. Es una situación social y económicamente precaria y puede llevar a la escasez de recursos básicos. Los precios de los alimentos pueden dispararse, como ocurrió entre 2005 y 2008, lo que puede dar lugar a disturbios.

Algunos de esos países buscan otras formas para alimentar a su población. Una de las estrategias es comprar grandes extensiones de tierra en Asia y África para cultivar y exportar alimentos. En ocasiones, con este método se perjudica a los habitantes locales de las zonas de cultivo, a los que se priva de su medio de vida y que acaban en la pobreza más absoluta.

Pero hay otros métodos que no perjudican a otras comunidades y, además, se pueden llevar a cabo en el propio país.

El investigador japonés Yuichi Mori, de la Universidad de Waseda, está utilizando un plástico elaborado con hidrogel conocido con el nombre de Saran que tiene un bajo nivel de permeabilidad del vapor de agua. De este modo, se pueden cultivar plantas en un suelo preparado con este tipo de material.

Según las pruebas llevadas a cabo, esta técnica utiliza una décima parte de agua y sólo una pequeña cantidad de abono para que el producto crezca lo mismo que la agricultura convencional. Las plantas, además, están libres de patógenos, pesticidas y contaminantes como el petróleo o metales pesados, ya que la membrana filtra dichos compuestos. El agua extraída a través de las raíces de la planta pasan a ella, pero esos otros compuestos no.

Las primeras pruebas en invernaderos del desierto han resultado un éxito: tomates y otras plantas crecen gracias a esta membrana de plástico directamente sobre la arena del desierto. Un sistema de tuberías de riego por goteo abastece de agua y nutrientes. Según Yuichi Mori, puede funcionar en cualquier superficie, incluso en la tierra contaminada por el tsunami de 2011 en Japón. Sólo se necesita espacio y sol.

Una empresa con sede en Dubai llamada Agricel quiere comenzar a comercializar la tecnología. Unas 180 granjas están experimentando con la técnica de cultivo. Si todo va bien, las granjas de película plástica podrían permitir la agricultura en el desierto.

1 comentarios

  1. Me gustaria saber mas sobre el cultivo de tomate y que otros productos se puede cultivar gracias por su atencion

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *