Helsinki es una ciudad de contrastes. Los azules de su amplia zona costera contrastan con el verde de sus increíbles parques urbanos. Sin embargo, pese a ser una ciudad de tamaño medio y con un excelente transporte público, no se libra de sufrir el problema de la congestión del tráfico rodado.
Armas no les faltan para combatirlo. Y no precisamente por su red de tranvías, que es mucho más que movilidad sostenible. Con su parsimoniosa marcha, son un atractivo turístico con un punto nostálgico que también utilizan sus habitantes para ir de un lado a otro. Tampoco me refiero a su amplia flota de autobuses, sino a sus innovadores minibuses que, en plan futurista, y sacando el máximo partido del fenómeno del Big Data, miran al futuro con el Kutsuplus, un servicio de minibús que ajusta sus recorridos a las demandas hechas a través del smartphone.
SEGUIR LEYENDO «Helsinki: ¿La primera ciudad del mundo sin coches?»